Consejos para saber como dar más luz natural a tu hogar
La luz en el hogar tiene como objetivo principal iluminar una estancia completa y, convertirse a través de la luz adecuada, en un lugar agradable donde pasar el tiempo que necesitemos.
Con una adecuada iluminación, las personas pueden rendir mucho más ya que una buena iluminación influye en el estado de ánimo. Todos sabemos que no es lo mismo la luz del sol que la luz de una bombilla, cada una tiene sus virtudes para según que usos. Por tanto, cuando hablamos de la importancia de la iluminación, nos referimos tanto a la luz natural como a la artificial.
¿Qué es la luz natural?
La iluminación natural es la que proviene, principalmente, del sol o de algún organismo que produzca luz propia. Este tipo de luz natural cambia con respecto a las estaciones del año a causa de la rotación de la tierra y las condiciones del ambiente.
¿Qué es la luz artificial?
La luz artificial es aquella fuente producida por el ser humano y, principalmente, emitidas por bombillas o lámparas. Una ventaja de la luz artificial es que la podemos controlar a nuestra voluntad.
Hablemos de iluminación natural
La luz natural nos permite embellecer los espacios, dándole vitalidad al hogar y, además, permite un ahorro notable en los gastos de la factura de la luz. Si necesitamos un espacio acogedor, resulta imprescindible conseguir estancias bien iluminadas y, siempre que sea posible, aprovechar al máximo la luz natural.
¿Cómo utilizo la luz natural?
Maximizar el uso de la luz natural en casa es una de las tareas más importantes ya que se recomienda optimizar al máximo esta iluminación. Muchas veces, tenemos la teoría clara pero no sabemos cómo afrontar la iluminación. ¿Cómo consigo que mi casa esté iluminada con luz natural el mayor tiempo posible? Aquí te presentamos unos trucos para que maximices la entrada de luz natural en tu hogar:
1. Distribuye correctamente el espacio en tu hogar
Una de las mejores maneras de aprovechar la luz del sol es elegir las zonas de casa con más tareas de iluminación y posicionarlas en las habitaciones con mejor iluminación procedente del exterior. ¡Ten cuidado con los reflejos o destellos de luz! Por ejemplo, si hablamos del salón de estar, no pongas tu televisor mirando a la ventana, ya que perderíamos la visión del mismo durante las horas de sol.
Si tu hogar carece de habitaciones con una iluminación exterior potente, lo ideal es optar por claraboyas o elementos que permitan la entrada de luz natural en los espacios interiores, no obstante, este tipo de obra no está al alcance de todos. Es por ello que, la manera más "fácil" de dotar de iluminación natural a las zonas más internas de la casa es unificando zonas con poca luz con zonas con más luz eliminando tabiques.
Además, hay que evitar que cualquier mueble interrumpa el paso de la luz natural. Evita posicionar los muebles delante de las ventanas. Los muebles altos dificultan el paso de la luz natural (aunque no esté posicionado en la pared), por lo que, será clave evitarlos. No obstante, si ya cuentas con muebles altos, lo mejor es pegarlos en la pared.
2. Ventanas y puertas
Las ventanas que se encuentran más altas nos ayudan a generar una iluminación más uniforme. Además, respecto a las puertas deberemos usar cristales para facilitar la entrada de luz a la estancia principal y al resto.
Los colores de este elemento importa, ¡y mucho! Si queremos conseguir una buena iluminación natural deberemos pintar los marcos de las ventanas y las puertas de color blanco o colores claros en su defecto. Estos colores reflejan la mayor parte de energía, por lo que cuanto más claro sea el color, la luz se reflejará al 100% y nada será absorbido.
3. Los colores de nuestras paredes, ¡también importan!
La elección de los colores está clarísima: debemos utilizar blancos, tonos neutros y, amarillos ya que estos ayudan a generar espacios mucho más luminosos. Deberás tener en cuenta que, además, los tonos suaves y pasteles otorgan claridad y sensación de amplitud del espacio. Esto también lo conseguiremos con techos blancos o colores más claros que los que hemos decidido para las paredes.
Respecto al suelo, también necesitaremos materiales claros y brillantes. Con todo ello, conseguiremos una estancia acogedora, clara y con gran amplitud.
4. Mobiliario y espejos
En el momento que elegimos nuestro mobiliario, debemos tener claro que las mejores piezas han de ser blancas o maderas claras. Estas suponen ligereza y aportan, una vez más, a la amplitud y la luminosidad. Si estás replanteándote otros materiales, son relevantes los materiales lacados o brillantes.
Los espejos... ¡importantísimos! Son elementos que aportan una gran carga decorativa a la estancia y resultan imprescindibles a la hora de multiplicar la luz por el espacio.
Hablemos de iluminación artificial
Este tipo de luz es aquella producida por el ser humano de las que existen miles de iluminaciones, no obstante, la forma más eficiente de conseguirla es con tecnología LED. Una gran ventaja de esta iluminación es que la podremos controlar a nuestra voluntad.
Dentro de la luz artificial, podemos encontrar tres tipos de necesidades: la luz ambiental, la luz puntual o focal y, la luz decorativa.
Luz ambiental
La iluminación ambiental es la más básica de las tres formas de luz artificial. Esta luz es, mayoritariamente, indirecta. Además, este tipo de luz, se puede conseguir con lámparas de pie o luces empotradas en el techo.
Es cierto que la elección entre ellas a la hora de decorar el hogar suele basarse, mayoritariamente, en el gusto de las personas. No obstante, no debemos olvidar que también tenemos que tener en cuenta el tipo de iluminación que queremos y saber si, con la iluminación que hemos elegido, lo vamos a conseguir.
Lámparas de Pie
Las lámparas de pie son muy versátiles, ya que iluminan y decoran al mismo tiempo. Además, hoy en día existen miles de diseños, materiales, características y colores diferentes, por lo que es muy probable que encontremos la lámpara de pie ideal. Sin hacer mención a que es un elemento práctico ya que su ubicación puede cambiar con facilidad, estos elementos prescinden de muebles de soporte y tampoco necesita de puntos de perforación en la pared.
Estas lámparas consiguen una luz acogedora y general que aportan decoración al hogar. Es una buena opción si necesitamos luz de ambiente general. No obstante, debes tener en cuenta que requieren limpieza regular y que, en muchas ocasiones, ocupan más espacio que las otras.
Lámparas Empotradas
Estos focos son una fuente de luz que se encaja en el techo, ya sea falso, pladur, escayola o de hormigón. En este caso, también existen muchos tipos de focos que se diferencian según su tipo de instalación, diseño, el ángulo de luz, los lúmenes o la temperatura de la luz del color.
Con este tipo de lámpara, encontramos una iluminación muy semejante a la luz natural y, pese a que están indicados para cualquier instancia, son elementos muy adecuados en baños, cocinas, pasillos, recibidores y escaleras. Su gran ventaja es que ofrecen un encendido instantáneo y la cantidad de uso no perjudica directamente a su vida útil, ya que posee de una tecnología duradera.
Si tu decisión va más encaminada a estos elementos, ten en cuenta que hay que instalar un mínimo de 4W por metro cuadrado para tener una buena iluminación en la estancia. También podrás escoger plafones con más potencia, teniendo en cuenta que cuántos más lúmenes tenga, menos lámparas necesitaremos para iluminar la estancia.
Luz puntual o focal
Este tipo de iluminación tiene por objetivo iluminar un área definida para realizar cierta actividad. La iluminación puntual es la ideal para complementar la luz general y dar mayor definición a ciertas actividades como cocinar, afeitarse, maquillarse, trabajar, etc.
Este tipo de iluminación la ofrecen las lámparas de escritorio o los focos direccionales. A continuación, te detallamos que puedes conseguir con cada uno:
Lámparas de Escritorio
Las luces que necesitamos para hacer una tarea en concreto, por ejemplo estudiar, no pueden provenir del techo, ya que esta luz se dispersará y no te ayudará a realizar la actividad. Por ello, la opción perfecta para este tipo de situaciones es contar con una lámpara de sobremesa que nos proporcione una luz extra a la luz general. Por ello, estas lámparas son necesarias para iluminar zonas en concreto.
Focos Direccionables
Luz decorativa
La luz decorativa está destinada a destacar objetos o estructuras del hogar, pero nunca iluminar una estancia como tal. Su función es únicamente decorar, no iluminar, por ello puede ser muy independiente al resto de la iluminación del hogar.
En esta iluminación podemos contar con las guirnaldas y las lámparas de diseño, aunque en ambos casos presentan muchísimos diseños y características en el mercado, su función que cumplen (decorar) es la misma para todos los casos.
Guirnaldas
Lámparas de Diseño
El tipo de iluminación que necesitas vendrá dado según tus objetivos. Para estar seguro al 100% de tu decisión deberás tener en cuenta el objetivo que persigues, los puntos de luz con los que cuentas, las posibilidades de utilizar mayoritariamente luz natural y, sobre todo, saber cuáles son los colores de tu estancia, ya que ello se prestará a un tipo de iluminación u otra.